Caso: la minería chilena sufre un problema de estrechez de capital humano, especialmente en los segmentos técnicos. Uno de los motivos de esta falencia es que las instituciones educacionales en Chile que ofrecen carreras técnicas (Centros de Formación Técnica, Institutos Profesionales y Universidades «Técnicas»), no le dan prioridad a las necesidades del sector minero. Esto se produce porque la minería no es intensiva en mano de obra y por ende representa una pequeña proporción de los futuros empleadores de los egresados. Por lo anterior, el sector minero valora la experiencia en terreno en desmedro de la formación en aulas. Los alumnos perciben el escaso valor del título y por consiguiente abandonan sus estudios. Al existir un número limitado de titulados de «carreras mineras», que no están alineadas con los requerimientos de la industria, se produce una estrechez de capital humano antes mencionada.
Metodología: se acredita que uno de los motivos por los cuales las empresas no resuelven este desajuste entre la oferta y demanda de capital humano es que existe una falla del mercado (denominada «externalidad»): el capital humano formado por la empresa es susceptible a ser «levantado» por otra empresa del rubro. A falta de incentivos para invertir, las empresas sub-invierten.
Resultados: se propone que se instaure un programa de «Formación Dual» que consiste en que los alumnos intercalen semestres en aula con semestres en faena. Mientras dura la carrera, los alumnos se forman de manera integral y la empresa dispone de capital humano fresco. Una manera de llevar a cabo este proyecto es formando alianzas con una o varias instituciones de formación técnica, las cuales son evaluadas preliminarmente en este informe.